CONS viene de la suma de muchos ¿por qué?
La historia detallada de la marca la voy contando en cada post de @cons_ccc, pero haciendo un recuento puedo decir que todo empezó cuando era niña, cuando mi papá me enseñó de alguna manera a preguntarme ¿Por qué?, cuando me enseñó a cuestionar. Y aunque creo que eso ha sido la base de mi vida; lo que determina mi forma de ser y de donde sale todo lo que soy como persona; creo que lo que realmente encaminó mis cuestionamientos fue el hecho de hacerme vegana hace 8 años. En esos tiempos no conocía a más de 2 personas veganas, no tenía referencias y casi no había información del tema. Tenía muchas dudas, si ya de por sí siempre me he cuestionado todo, imagínense como estaba mi cabeza.
No dudaba de mi decisión; el respeto por los animales humanos y no humanos me motivaba al 100%; pero no sabía cómo hacer de esa decisión algo sostenible en mi vida.
Siempre he sido *intensa*. Cuando algo me interesa cuestiono e investigo sin descanso hasta tener la información necesaria para sacar mi propio criterio del tema, no me gusta quedarme con lo primero que veo o me dicen. Puedo pasar días, semanas enteras, obsesionada investigando algo. Y así he pasado todos estos años, aprendiendo sobre nutrición, activismo, sostenibilidad, derechos humanos, explotación animal, evolución, consumo consciente y un largo etc porque el veganismo es una posición política, ética y social que te abre la mente, es como que la conciencia que trae una decisión así, se empieza a extender por todos los ámbitos de tu vida.
Empecé leyendo etiquetas, para asegurarme que lo que consumía no tuviera ningún ingrediente de origen animal, pero terminé cuestionando sobre ciertos ingredientes que, si bien no eran de origen animal, ¡no sabía qué eran! ni por qué estaban en mi comida, en mi shampoo, en mi labial.
Al principio solo era para mí, quería saber qué era cada ingrediente para poder elegir lo mejor para mí. Luego me di cuenta que he vivido engañada y que he comprado, sin saber, productos que contenían ingredientes cancerígenos, prohibidos en otros países, disruptores endocrinos o que con mi compra había financiado a empresas con denuncias de explotación laboral, de trabajo infantil, de daño ambiental etc. Ahí empezó mi búsqueda de marcas más conscientes y responsables y ahí también empezó mi frustración porque, aunque sí hay, aún son muy pocas y no siempre eran accesibles para mí. Eso me pasó con el maquillaje y cosmética en general.
Traté de comprar local o de buscar en países vecinos pero no encontré una solución para lo que yo quería así que dije: ¿¿ Qué tan difícil puede ser hacer maquillaje que pigmente bien, que sea de larga duración, con ingredientes de fuentes vegetales y renovables, con envases ecológicos, que sean una buena alternativa a las marcas comerciales?? Quien iba decir que en unos meses después estaría tragándome mi pregunta, rompiéndome la cabeza tratando de crear fórmulas que funcionen y vayan bien en los envases que tanto me costó encontrar.
Ya voy un año tomando clases para hacer cosméticos profesionalmente, como los que yo tanto buscaba y si, ha sido difícil, de hecho si alguien me hubiese dicho todo lo que implicaría tal vez no me hubiese metido en esto pero aquí estoy, tratando de desarrollar productos como los que me hubiese gustado encontrar a mí.
Y si llegaron hasta aquí, hasta este párrafo y sobre todo a este sitio web, seguramente es porque ustedes también tienen una historia de infinitas preguntas por la que yo, sus seres cercanos y el planeta estamos agradecidos. Gracias por preguntar, por querer saber más, por no conformarse, por buscar más opciones, por buscar respuestas. Al final este proyecto, esta marca, no es una empresa de cosméticos y cuidado personal, es, de hecho, mi forma de compartir con el mundo lo importante y valioso que es cuestionar-se y buscar ser más consciente, no tanto desde el punto de vista moral sino más bien desde la búsqueda del conocimiento, del saber, del conocer. Y aquí, me disculpan pero voy a poner una frase que yo me maté inventando y que siento que define perfecto lo que quiero decir en resumidas cuentas:
La consciencia es la manifestación más profunda del conocimiento y el conocimiento es la herramienta más poderosa de la libertad.
Atentamente
Vale
Y si les gusta el chisme como a mí, pueden mandarme un DM a Instagram y contarme o preguntarme lo que quieran =D
Porque necesitamos empezar a ver más allá del producto o servicio, necesitamos saber a dónde se va nuestro dinero, a quién o qué está financiando nuestra compra. Si empezamos a consumir marcas con valores y principios obligamos a que las marcas busquen ser coherentes y responsables y no solo rentables.
Yo no quiero apoyar a una empresa que no paga lo justo a sus empleados, no quiero dar mi dinero a una empresa que no se preocupa por su impacto ambiental, no quiero comprar un producto de una empresa que utiliza el engaño y la desinformación como estrategia de ventas, no quiero financiar xenofobia, homofobia, racismo, machismo, abuso de poder, no quiero no saber a dónde se va mi dinero porque eso me quita lo más valioso que tengo que es el poder de elegir, me quita libertad.
Yo quiero ser parte y quiero apoyar a empresas conscientes. Sé que no todo puede ser perfecto, que hay cosas que no están a nuestro alcance y no se puede controlar pero en la medida de lo posible yo quiero comprar a marcas que trabajen todos los días por ser mejores, por servir a la comunidad, por contribuir al medioambiente y no solo por ganar dinero.
Contáctanos:
Nuestras redes sociales: